Sábado – 23 de Agosto
Después de 12 horas de tren llegamos a Airlie Beach, que es el pueblo base para conocer The Whitsundays. Es un pueblo muy turístico, lleno de agencias de viajes y bares. Es una especie de Ibiza, pero a un nivel mucho más bajo.
Todas las excursiones de un día han salido ya cuando llegamos, así que nos vamos a una agencia de información turística para ver qué podemos hacer durante el día. Nos venden unos billetes de ferry para ir a visitar una isla que se supone es increíble. La verdad es que viendo el color del mar y el paisaje parece que la isla va a ser realmente increíble. Pero no. Llegamos allí y bueno, muy chulo los árboles y la vegetación, pero las playas son bastante feas. Por cierto, la isla es muy pequeña, casi se puede recorrer el perímetro en menos de uno hora. Casi toda su superficie la ocupa el típico hotel resorte hortera. Asé que un poco fracaso la excursión, pero hasta que no se hace, no se aprende.
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