Son las 8:30 am de un viernes laborable en Melbourne. En la parada del tranvía hay ejecutivos y estudiantes, y luego estoy yo, con chanclas, mochila y la tabla de surf… que pena que fuera muy difícil hacerme una auto foto!! El tranvía lo tengo que coger para ir hasta la oficina de alquiler de coches, donde he quedado con el resto de amigues para irnos de viaje por la Great Ocean Road, que es una carretera, como su propio nombre indica en inglés, que recorrer el sur del estado de Victoria y se supone que es una de las grandes atracciones turísticas en Australia.
Ya en el coche y llegando a la costa y según nos vamos acercando, más se va nublando… y al rato, ya metidos en plena carretera, llueve a cantaros! Yo me tengo que cambiar como puedo en un parking y ponerme unos calcetines y unos vaqueros… la carretera es muy bonita la verdad, pero con tanta lluvia, no se disfruta tanto.
Paramos a comer en un sitio de “Bocadillos” si, si, Spanish Bocadillos. También hay Estrella y Cruzcampo y Spanish Omelette.. me pido el Spanishi Bocadillo with Manchego cheese y Serrano ham. Menuda decepción. El pan era de cuando James Cook llego aquí y el queso y el jamon parecían más de la vaca que ríe y de york… en fin.
Seguimos conduciendo, esta vez piloto yo, que voy más tranquilo y menos mareado al volante del bólido. Por la carretera se ven bastantes koalas, pero ya como que los koalas no son tanta novedad y como tampoco es que hagan mucho los animalitos.. pues nada, que ni si quiera les hago fotos.
También nos desviamos para ver el faro más antiguo de Australia, pero cobraban 15 dólares por verlo. Así que nada, luego lo busco en google y lo veo en internet!
Cuando está atardeciendo empieza a despejarse el día, lo cual es perfecto porque justo estamos llegando a la mayor atracción de la carretera, los 12 apóstoles. Realmente increíble! Merece la pena todo el viaje y toda la lluvia para ver este espectáculo. Mejor verlo en las fotos, mucho más no se puede decir!
Por la noche una buena cena a base de pescado y luego una mala noche a base de ronquidos. Es lo que pasa cuando se viaja a lo pobre.
