Zambia y Kruger Park

Ya estoy de vuelta en mi hotelito de Jo’burg después de una semana de arduos viajes y reuniones. Procedo a relatar los hechos :

Miércoles 1 de Marzo


7 am, aeropuerto de Jo’burg rumbo a Ndola, Zambia. El avión es otro clásico de la aviación. Aeropuerto de Ndola. Esto no es ni aeropuerto ni es na’. Esto es una barracón de aluminio con 2 mesas y como siempre a pagar por el visado. Coche de alquiler, otra joya del transporte moderno… Pasamos un rato en Ndola, que se pronuncia endola. Para ser breve, esto es la mitad de ninguna parte. Es feo, no tiene ningún encanto y el mejor restaurante es una pizzería que se llama Michel Angelo. De ahí vamos a Kitwe, una de las ciudades principales del Copper Belt. El Copper Belt (el cinturón de cobre) es una zona muy rica en cobre que cubre el Congo y Zambia, motivo de muchas disputas entre los belgas y demás contendientes europeos. Gracias a la buena gestión en la zona, primero de los sabios colonizadores y después de los grandes lideres africanos, los niveles de pobreza que se ven por aquí, una de las zonas con recursos naturales mas ricos del planeta, son alarmantes.

El hotel en Kitwe, bastante cutrecillo. En el Plaza no quedaban camas… Por la noche, cena con los clientes chinos. Esto es surrealista. 50 chinos, de los cuales solo uno habla ingles (y mal) encerrados en una casa en mitad de Zambia con su propia cocina, servicio y demás. La conversación a la mesa, como os podéis imaginar, es de lo más amena, sobre todo gracias a la traductora, que da la impresión de que no sabe hablar ni ingles ni chino. Solo se entienden los eructos y los pedos que estos guarros orientales orquestan cada cinco minutos. También están sus famosos duelos con vino de arroz, que no se para que lo intentan si no pueden asimilar el alcohol… en fin, humor amarillo.

Jueves 2 de Marzo

Placentero viaje por las carreteras del Norte del país en el confort del coche alquilado. Sanísimo para los riñones. El paisaje, muy parecido al del sur del Congo, lo cual es bastante lógico. La verdad, lo más impresionante son las nubes. Se elevan hasta al menos 10 kms (lo sé porque el avión vuela a 30,000 pies entre las nubes, no me lo estoy inventando) y cuando la luz del atardecer se refleja en ellas, parece que se van a caer sobre ti….. y se caen, en forma de lluvia y granizo. Bueno, el viaje era de ida y vuelta hasta Solwezi, otra ciudad que esta ahí por que hacia falta levantar algo en 100 kms a la redonda….

Viernes 3 de Marzo

Reuniones matutinas y viaje en avión vespertino. Por la noche cena con gran jefe parisino y a dormir a otro hotel distinto, ya que en el mío habitual no quedaban plazas. Así que me voy al nuevo hotel. Que no es un hotel, es una casa hecha hotel. Me recibe Collin, dueño y señor de sus terrenos y me recogen las maletas Mary y Tobita, dos negritas, pero ellas llaman a Collin “yes, master”… en fin, yo no salía de mi asombro. Me fije en la vajilla por el reverso para ver si estaba la esvástica, pero no la vi… pero seguro que andaba por algún lado….

Sábado 4 de Marzo

Como el jefecin estaba por aquí y no sabíamos que hacer con él, pues nos fuimos a ver a nuestros clientes de Phalaborwa, los que tienen la mina al lado del parque Kruger. Por esas regiones suele hacer mucho sol y calor. Perfecto para jugar al golf y esas cosas. Bueno, el caso es que nos subimos al avión, al microbús con alas, y a los 45 minutos empezamos a sobrevolar el Kruger, y esto se empieza a mover…. Ahora saltamos 2 metros ahora nos vamos 3 metros a la izquierda y la pista de aterrizaje que se ve a 100 metros y que no enfilamos, que no enfilamos señor piloto!! Pero ahí que finalmente tocamos tierra (en la pista) bajo un silencio sepulcral…. Y nos bajamos del bicho y hace frío y no se puede andar del viento… del plan de golf poco. Mi situación no cambiaba mucho, por que no sé jugar al golf de todos modos…

Por la tarde, cogí el coche y me fui a dar una vuelta de 200 kms por el Krugger (100 de ida y 100 de vuelta). Lo que más vi fue boñiga de elefante, el resto, os lo enseño en fotos…





Domingo 5 de Marzo

El domingo, poco que hacer, por la tarde me animé a ir hasta el campo de golf, sorteando jabalíes a mi cuenta y riesgo, a dar una clasecilla bajo la atenta inspección de los monos… tengo que decir que no se me dio mal, pese a que me duele la espalda aún hoy…

Lunes 6 de Marzo

Reuniones y vuelta a Jo’burg. El avión trae 5 horas de retraso. Así que todo el día perdido, pero tomé estas fotillo, bastante chula a mi parecer...